Si queréis compartir algo con los más pequeños, aquí tenéis unas ideas que me he encontrado en la biblioteca municipal:
En este cuento de gran formato, escrito por Anthony Browne, cuyas ilustraciones son espectaculares, se narra una hermosa historia (los más pequeños pueden leerla ellos solos a través de las imágenes) de dos amigos de muy diferente tamaño.
Y como en la mayoría de las historias que a mí me gustan pero no es frecuente encontrar, es el más pequeño el que saca las castañas del fuego.
A los pequeñines les encanta, les gusta mirarla y que se la cuenten una y otra vez, cosa que a los mayores nos gusta más todavía, porque demuestra que están interesados.
Es bonito pedirles que la cuenten ellos, antes y después de leérsela nosotros; os sorprenderéis de lo que podeis oir.
Esta libro ha sido una sorpresa pues no lo conocía y me ha encantado.
De formato apaisado y con pastas blandas, nos enseña que las brujas no son tan malas y que las hadas no son tan buenas; así que lo mejor para una niña puede ser sopesar las ventajas e inconvenientes de ambas o convertirse en un hadabruja (puede que incluso se convenza también de ello a una mamá hada)
La edición que he leído, de Bárbara Fiori, es del año 2006; no sé si la habrán editado después otra vez en otro formato.
Estas dos obras son sólo una muestra de todo lo bueno que se puede encontrar en una biblioteca municipal, pero hay muchísimas más que nos pueden enganchar. Ya lo sabéis, mi lema es que llevéis a los niños/as a la biblioteca y que sean ellos los que decidan lo que quieren leer porque su elección es garantía de motivación.
PD: El libro de "Ser princesa no es un cuento" ya está en el expositor de novedades de la biblioteca Salvador Rueda de Nerja, en la provincia de Málaga.
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